Aunque un poco extrañas por estas tierras, las ensaladas tibias/calientes con pasta son tradicionales en algunas regiones de Europa, tales como Alsacia. Esta en particular es una deliciosa combinación de sabores, excelente como entrada para una Comida-Especial. Y también, extrañamene, los ravioles de perejil eran los preferidos de mis chicos cuando se los hacía, hace ya unos cuantos años, con una salsita de tomate y crema. Y fue casualmente mi hija Ceci quien por suerte me los recordó hace unos días.
MASA
– 220 g de harina 0000
– 2 huevos
– 1 puñado de hojas de perejil
– aceite de oliva c/n
– una pizca de sal y pimienta blanca
SALSA
– 2 echalotes medianos
– 1 diente de ajo
– 2 cucharadas de vinagre de vino
– 4 cucharadas de aceite de oliva
– 4 cucharadas de yogur
– 1 puñado de perejil picado
– sal y pimienta
Preparamos la masa del modo habitual (ver Masa Básica para Pastas), la estiramos lo más delgado posible y dividimos en dos láminas; sobre la primera vamos colocando hojas grandes de perejil (1 ó 2 por raviol) cubrimos con la otra lámina y presionamos bien con un palo de amasar de modo que las hojas de perejil se hagan bien visibles (ver foto) y cortamos con cortapastas o molde.
Picamos bien los echalotes el ajo y el perejil; unimos con el yogur, el vinagre y el aceite, salpimentamos y batimos energicamente hasta espesar la mezcla.
Hervimos la pasta y una vez al dente la mezclamos con la salsa fría.
Servimos y disfrutamos, salut!