– 1 kg de harina
– 750 cc de agua
– 200 cc de aceite de oliva
– 25 g de levadura fresca
– 25 g de sal
– 250 g de corazones de alcahuciles fileteados
– 100 g de tomates secos
– 1/2 cucharadita de pimienta negra
Ponemos los tomates a hidratar en agua tibia.
En un bol con la totalidad del agua mezclamos la mitad de la harina con la levadura; cubrimos y dejamos levar por hasta que se vuelva burbujeante, de 30´ a 45´.
Añadimos la sal, la pimienta, el aceite de oliva y el resto de la harina y volvemos a mezclar (ni hace falta ni es posible amasar). Cubrimos y dejamos levar hasta que duplique su volumen, aprox 1 hora.
Desgasificamos la masa, la volcamos sobre la asadera previamente aceitada y con las manos enharinadas la estiramos hasta cubrir toda la superficie de modo parejo.
Distribuimos por encima las láminas de alcahuciles y los tomates secos, cubrimos y dejamos levar por 30´ en un ambiente cálido.
Horneamos a 200* hasta que se vea bien cocida, aprox 20´.
Sabrosa caliente, sabrosa tibia, sabrosa fría!