Clases de cocina personalizada

CHEESECAKE SIN COCINAR CON COULIS DE ARÁNDANOS

El domingo pasado unos amigos me invitaron a un “asado de elecciones” en el cual, mientras degustábamos chorizos, mollejas, bondiola, costilla, ensaladas, vinos por supuesto y luego por supuesto postres, debatimos intensamente acerca de quién ganaría las elecciones, si habría o no ballotage, lo mejor para el país, lo mejor para nosotros, Fue un encuentro definitivamente muy nutritivo!

A mí me tocó esta vez traer “algo dulce, rico y abundante…” y con esta cheesecake creo que quedé muy bien, estuvo, modestamente, riquísima. Ya publiqué hace un tiempo una receta de cheesecake sin cocinar, pero esta es aún más fácil además de sabrosísima, muy recomendable. Para una tartera de 25 cms de diámetro y por lo menos 24 porciones:

– 2 paquetes galletitas tipo Lincon, Manon o María (usamos Lincoln)
– 200 g de manteca derretida
– 870 g de queso crema a temperatura ambiente
– 1 pote de leche condensada
– ¼ taza + 1 cucharada de jugo de limón
– 1 cucharadita de esencia de vainilla
– 7 g de gelatina sin sabor (1 sobre)

COULIS
– 200 g de arándanos frescos
–     2 cucharadas colmadas de mermelada de arándanos
–     1 cucharada de azúcar
–     1 cucharada de agua
–     1 cucharada de jugo de limón

Procesamos las galletas hasta lograr un arenado fino; mezclamos con la manteca y 1 cucharada

de jugo de limón y revolvemos hasta integrar.

Tomamos la tortera desmontable, forramos su base y lados hasta unos 5 cms y enmantecamos.

Volcamos dentro la mezcla y presionamos de modo parejo en la base y hasta unos 5 cms de altura. Llevamos al freezer al menos por 15 minutos.

Hidratamos unos minutos la gelatina en 35 ml de agua fría y antes de incorporarla a la mezcla la ponemos unos pocos segundos en el microondas a temperatura máxima.

En un bol grande mixeamos el queso crema hasta lograr una buena cremosidad e incorporamos de a poco la leche condensada; añadimos el jugo de limón, la gelatina y el extracto de vainilla y revolvemos.

Volcamos dentro de la tartera alisando con una espátula de goma.

Cubrimos con papel film y llevamos a la heladera hasta que esté firme, de 2 a 3 hs (mejor hasta el día siguiente).

Para preparar el coulis calentamos la mermelada con el agua, el jugo de limón y el azúcar y cuando rompe a hervir incorporamos los arándanos; reducimos el fuego, cocinamos por unos 5´, apagamos y dejamos entibiar.

Quitamos el aro de la tortera y el papel de aluminio, colocamos en un plato de servicio y cubrimos con el coulis de frutas. (Podemos también florear con ralladura de limón).

Les sugiero prepararla, es una excelente versión de cheesecake sin cocinar!

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