– 200 g de masa madre
– 600 g de harina de trigo 000 (común)
– 150 g de harina de centeno
– 500 cc de agua
– 10 g de levadura fresca
– 50 g de semillas de lino
– 75 g de semillas de girasol
– 1 cucharada de miel
– 1 cucharada colmada de sal
– 1 huevo ligeramente batido
Retiramos la masa madre de la heladera y en un bol la desmenuzamos en el agua con la mitad de la harina; mezclamos con cuchara de madera y esperamos un par de horas hasta que tome temperatura y comience a levar.
Pasadas las 2 ó 3 hs, no es preciso que sea un tiempo muy exacto, agregamos la levadura desgranada y luego la harina de centeno, la miel, la sal y las semillas. Mezclamos hasta integrar, volcamos sobre una superficie de trabajo ligeramente enharinada y amasamos durante unos 15´ hasta obtener una masa liviana, suave y elástica.
Hacemos un bollo y lo dejamos levar en un bol cubierto y pincelado con aceite hasta que duplique su volumen, de 2 a 4 hs, dependiendo de la temperatura ambiente y la fuerza de la masa.
Volcamos el bollo sobre la superficie de trabajo, desgasificamos, hacemos un chorizo y dividimos en 3 partes iguales, las bollamos, cubrimos y dejamos reposar 15` a 30´. Encendemos el horno.
Para dar forma a los panes hacemos lo siguiente:
– Sobre superficie enharinada presionamos cada bollo con la mano conformando un rectángulo;
– volcamos uno de los lados más largos del rectángulo hacia su centro y sellamos con el canto de la mano;
– repetimos con el otro lado y volvemos a sellar;
– volvemos a estirar presionando con las palmas de la mano y repetimos la operación.
– volcamos un lado de la masa sobre el otro y sellamos firmemente con los dedos todo el perímetro;
– hacemos con la masa un vaivén suave estirándola hasta el diámetro de la asadera y angostándolo ligeramente en los extremos;
– ubicamos las piezas con la costura para abajo sobre la asadera previamente enharinada;
– cubrimos y dejamos levar unos 45´ en ambiente cálido y sin corriente de aire.
– pincelamos con huevo y efectuamos algunos cortes con un cutter o cuchillo filoso.
Horneamos en horno prehumidificado y a 200* por unos 40´; el pan debe lucir bien tostado y su base sonar hueca. Retiramos y dejamos orear sobre rejilla.