– 1 pizca de pimienta blanca
– 2 cucharadas de almendras
– sal y pimienta negra recién molida
Preparamos la masa del modo habitual (ver: “Masa para pasta al Huevo, Técnicas Básicas“) sólo que en esta oportunidad procesamos previamente la remolacha con los huevos. En función de la humedad de la remolacha la masa podría tener que ajustarse con un poco más de harina o agua, lo cual haremos siempre con mucho cuidado. Estiramos la masa hasta el último punto y cortamos a cuchillo tiras de unos 25 cms de largo por 2 cms de ancho.
Cocinamos la pasta bien al dente, no más de 2´; retiramos y escurrimos bien reservando un poco del agua de la cocción.
Mezclamos la pasta con el pesto y el líquido de la cocción que encontremos necesario, floreamos con las almendras reservadas y servimos de inmediato dejando a los comensales la opción de adicionar parmesano rallado.
Un plato de pastas liviano, colorido y delicioso!