– 250 g de harina 0000 (refinada)
– 10 g de levadura fresca
– 125 cc de agua
– 50 g de queso parmesano rallado
– 2 cucharadas de aceite
– 1 cucharadita de miel
– 1 cucharadita al ras de sal
Hacemos un volcán con la harina y la sal por fuera y en su centro volcamos el agua y disolvemos la levadura y la miel. Echamos de a poco la harina al líquido y cuando comienza a integrarse agregamos el aceite y el queso. Amasamos por unos 10`hasta obtener una masa suave y relativamente firme. Cubrimos y dejamos reposar por 15´.
Encendemos el horno. Sobre una superficie de trabajo ligeramente enharinada estiramos la masa dándole forma rectangular y de un espesor de aprox 1cm; la espolvoreamos con harina, doblamos sobre sí misma, volvemos a estirar, y repetimos esta operación por 3 ó 4 veces. Con un cuchillo filoso o cuter, cortamos lenguetas de aprox 25 x 5 cms y las vamos colocando en una asadera previamente engrasada.
Si deseamos las lenguetas delgadas y muy crocantes las llevamos inmediatamente al horno; si las deseamos un poco más esponjosas, las cubrimos y esperamos unos 30´antes de hornear.
Horneamos en horno medio (180*) y prehumidificado por unos 25´ hasta que las veamos doradas y crocantes. Retiramos y dejamos orear sobre rejilla.
Unas riquísimas lenguetas, relativamente fáciles y rápidas de preparar!