– 1/4 cucharadita de sal
– 50 g de maní (es mejor comprarlos con cáscara o con piel, son más ricos y crocantes)
– 50 g de aceite de oliva extra virgen
– 50 g de parmesano rallado
– 1 cucharadita de sal
– pimienta negra
Preparamos la masa del modo habitual (ver Masa para Pasta al Huevo, Técnicas Básicas); según el tamaño de los huevos podremos requerir algo más de líquido en cuyo caso adicionamos aceite; ojo, si la masa queda muy blanda luego durante el estirado vamos a tener que adicionarle demasiada harina. Estiramos hasta el punto máximo de la máquina, cortamos a gusto (a mano o a máquina) y reservamos sobre superficie enharinada y cubiertos por un repasador.
Procesamos primero las hojas de albahaca con el aceite de oliva y el ajo, debe lograrse una consitencia cremosa, agregamos el maní, procesamos un poco para que se partan, no demasiado, y luego incorporamos 3/4 del queso rallado mezclando solamente (reservamos el resto para florear los platos).
Ponemos a calenar abundante agua con sal y cuando rompe a hervir cocinamos la pasta por 2′ ó 3′ hasta que esté al dente; retiramos del fuego, escurrimos dejando algo de líquido, volvemos a poner en la olla junto con el pesto, mezclamos bien y servimos de inmediato esparciendo por encima queso rallado y un chorro de aceite de oliva.
Prueben hacer este pesto con la pasta que deseen, se sorprenderán gratamente. Pancita y bolsillo, ambos contentos….