– 220 g de harina 0000
– 2 huevos grandes
– 2 cucharaditas de aceite
– 1/2 cucharadita de sal
RELLENO
– 200 g de queso azul
– 75 g de almendras picadas grueso
– 3 ó 4 cucharadas de queso crema (según la intensidad de sabor que deseemos)
– una pizca de sal y pimienta.
SALSA
– 1 cucharada de manteca
– 2 o 3 cucharadas de aceite de oliva
– ciboulette picado, a gusto.
Hacemos una corona con la harina y echamos en el medio los huevos, la sal y las cucharaditas de aceite; mezclamos y amasamos bien, la masa debe quedar durita; reservamos.
Ponemos en una procesadora los ingredientes del relleno, procesamos y ajustamos las proporciones a nuestro gusto. Reservamos en heladera.
Dividimos en 2 la masa y estiramos hasta el punto más delgado de la máquina. Sobre una tira colocamos bolitas pequeñas de relleno equidistantes una de la otra (podemos ultilizar también un molde); rociamos ligeramente con agua, cubrimos, presionamos suavemente para que salga el aire, cortamos y dejamos reposar sobre superficie enharinada.
Cocinamos la pasta “al dente”en abundante agua con sal; derretimos mientras en una sartén grande la manteca y el aceite de oliva, volcamos sobre ella la pasta escurrida y el ciboulette picadito; mezclamos y servimos de inmediato.
Los degusté al mediodía mientras amasaba unos panes, me encantaron. Con un buen blanco seco y buena compañía hubieran estado aún mejor…
–
Una respuesta
Saúl, parece tan facil que por ahi me animo!!!Gracias por compartir tus experiencias!!