Son muy ricos y livianos; pueden comerse solos o con algún queso crema, un salmoncito ahumado… Para 15 scones de aprox 5 cms de diámetro x 3 de grosor:
– 10 gr de polvo de hornear (2 cucharaditas)
– 6 g de sal (una cucharadita colmada)
– 1 cucharadita de azúcar
– 50 gr. de manteca
– 1 huevo + otro 1/2 para pintar
– 50 g de crema
– 50 g de yogur natural (o leche, o crema)
Tamizamos la harina, le incorporamos el azúcar, la sal y la manteca, que vamos desmenuzando con un tenedor. Batimos el huevo con la crema y el yogur e incorporamos a la mezcla. Unimos todo con muy poco amasado.
Extendemos la masa sobre una superficie enharinada hasta un espesor de aprox 1,5 cms. Cortamos con un molde circular de 5 cms de diámetro, pintamos con huevo y horneamos a temperatura medio – alta por 10′.
No es fácil superar la prueba de comer uno solamente…