– 300 g de masa madre
– 500 g de harina
– 300 cc de agua
– 50 cc de aceite de oliva
– 50 g de aceitunas negras descarozadas y en rodajas o troceadas
– 50 g de aceitunas verdes descarozadas y en rodajas o troceadas
– 1 cucharada de miel
– 5 a 10 g de levadura fresca, muy poca
– 1 cucharadita colmada de sal
Retiramos la masa madre de la heladera, la desmenuzamos y la dejamos atemperar en un bol grande con en el agua. Agregamos la mitad de la harina y la miel, mezclamos, cubrimos y esperamos otra hora.
Incorporamos la levadura previamente desgranada, mezclamos de modo de facilitar su integración y añadimos el aceite de oliva, el resto de la harina y la sal.
Encendemos el horno. Volcamos el bollo sobre la superficie de trabajo, desgasificamo, lo dividimos en 2 partes iguales, las bollamos, cubrimos y dejamos reposar 30`.
Para dar forma a los panes, con cada bollo hacemos lo siguiente:
– Presionamos con la mano conformando un rectángulo,
– volcamos uno de los lados más largos del rectángulo hacia su centro,
– sellamos con el canto de la mano
– repetimos con el otro lado y volvemos a sellar
– estiramos un poco con las palmas de la mano
– volcamos un lado de la masa sobre el otro y sellamos con los dedos todo el perímetro.
– hacemos con la masa un vaivén suave estirándola hasta el diámetro del molde.
– colocamos cada pieza con las costuras para abajo dentro del molde previamente pincelado con aceite o enharinado y presionamos para cubrir toda su superficie.
– Pincelamos con agua o huevo o chuño, efectuamos algunos cortes con un cutter o cuchillo filoso, cubrimos y dejamos levar por 30´ en ambiente cálido, por ejemplo sobre la cocina.
Horneamos en horno prehumidificado y a 200* por unos 35´; el pan debe lucir bien tostado y su base sonar hueca. Retiramos y dejamos orear sobre rejilla.